Estoy perdido
El egoista
Una vida ordenada
La consecuencia
La unión
La sombra
El lado inferior de las cosas
La felicidad de Sísifo
La cosecha tardía
In vitro
La cólera divina
Idilio nocturno
Dando vueltas
El árbol que quería ver
Un día ordinario
El tiempo universal
El dilema
Cambiar el mundo
La sombra del amo
***
Concisa, contenida y elegantemente, este fotógrafo crea un mundo simbólico de la realidad humana. Añade una chispa de absurdo y otra de ironía y provoca un penetrante golpe visual que pone en funcionamiento nuestra mente. Sigue la linea de la metáfora de René Magritte, pero su visión personal del ser humano es más crítica, más dura; sus ambientes nos recuerdan algo al surrealismo metafísico, sólo que hay en ellos algo más ligero y burlón.
El arte de crear paradojas eficaces, combinando fantasía e ideas, no es muy abundante, precisamente porque es muy difícil. La inspiración y la profundidad intelectual deben ir de la mano para luego encontrar una buena forma de expresarse.
Gilbert Garcin, con escasos medios, lo logra. Su método es austero y bastante sencillo: tan solo maquetas y montajes fotográficos. Pero quizá con técnicas más sofisticadas sus ideas perderían ese chispazo penetrante que nos llega como una flecha. Sus fotografías tienen un aire teatral, que, aunque les quite frescura, les aporta extrañeza, llevándonos por el terreno de que quizá todo este mundo es el escenario donde practica y se recrea algún creador mayor que nosotros.
Realmente, pocas veces he disfrutado tanto «viendo» ideas. La mente también necesita refrescos como éstos. Cuando se contemplan muchas imágenes seguidas es cuando se entra en su excitante mundo. Por eso aconsejo visitar la web: http://www.gilbert-garcin.com/
Gilbert Garcin: Comienza su camino artístico en la fotografía tras jubilarse a los 65 años, en los años 90. Creó un personaje (él mismo) que actúa como observador y a la vez protagonista activo en todas sus fotografías.
De esta forma tan simple expone sus greguerías visuales.